Proyecto Educativo

Escuela de Colores es una escuela abierta, permeable, integradora, comunitaria, llena de vida, donde su mayor finalidad es EDUCAR

Educamos cuando saludamos, en los abrazos, cuando cantamos, en los talleres, cuando contamos un cuento, en la convivencia diaria. ¡Cuando ellos descubren el mundo! También educamos cuando comen, en el aseo, en el cambio de pañal, ayudándoles a ir al baño solitos, facilitando el descanso… Todos son momentos con gran valor educativo que se desmarcan de las rígidas rutinas para entrar en el campo de los cuidados.

Abrimos nuestras puertas tempranito, a las 7.30 de la mañana y cerramos a las 17.00h.

Nos inspiramos en la pedagogía Reggio Emilia, la cual defiende que el niño y la niña son protagonistas de su aprendizaje. Esta mirada pedagógica se alimenta de una serie de premisas:

Afectividad

como sentimiento fundamental en el desarrollo madurativo. Los niños y niñas a estas edades son pura emoción y ofrecerles herramientas de regulación emocional es un reto de nuestra tarea diaria.

Experimentación

como manera de investigar el mundo, el conocimiento de los objetos de manera sensorial.

Música

como un recurso en la vida del aula. Contamos con un proyecto de música en directo llamado: “La oreja que suena…que sueña” y acercamos la música en directo desde el disfrute de su sonoridad, sus ritmos y oportunidades de juego que nos ofrece.

Juego

como elemento principal para el desarrollo de las criaturas, no sólo adquiere un valor pedagógico sino también de bienestar y felicidad.

Cuentos

como ayuda para crecer. Para que un cuento sea efectivo, tiene que ser afectivo. Los cuentos proporcionan alas que los llevan a la imaginación. En Escuela de Colores los cuentos forman parte de nuestro día a día en diferentes momentos de la jornada escolar. Tenemos una librería con una cuidada selección de títulos.

Aprendizaje

fuera de las aulas... Hacemos salidas mensuales culturales. Así, nos vamos al museo, al teatro, al mercado, a la biblioteca municipal, a espacios medioambientales.

¿Cómo acogemos a las criaturas?

En septiembre comienza la acogida. Este es un periodo muy delicado donde cada niño y su familia tiene su ritmo de adaptación.

En Escuela de Colores la vamos personalizando según los intereses, necesidades y posibilidades. Por esta razón, en Escuela de Colores no hablamos de adaptación y sí de acogida.

Pasar del sistema familiar al sistema escolar es una transición que queremos vivir desde un lugar de confianza y seguridad.

¿Qué lugar ocupan las familias?

Las familias son muy, pero que muy importantes para nosotras. Cada una de ellas, desde el momento en que escolariza a su bebé en Escuela de Colores, está haciendo un ejercicio de confianza que no tiene precio.

Desde ese movimiento, trabajamos para que la relación y la comunicación con padres y madres sea fluida, cercana y accesible.

A diario, pueden dejar a su criatura con su educadora, no nos gustan las puertas cerradas, sentimos la escuela como un espacio compartido con las familias.

Los aspectos relacionados con la alimentación, el sueño y la higiene lo pueden ver cada día en una App gratuita. Trimestralmente tenemos los encuentros en familia donde compartimos un espacio de seguridad y acompañamiento respetuoso, conociendo algunas claves de la crianza o expresando dudas e inseguridades que surgen en el día a día.

Y, cuando una familia tiene la necesidad de hablar de forma más personalizada sobre su criatura, tenemos también un espacio de acompañamiento psicopedagógico.